La Secretaría Técnica de la Comisión Especial de Implementación Código Procesal Penal, con la contribución de reconocidos especialistas nacionales e internacionales y el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, ha elaborado la Guía Operativa de Litigación Oral con el Código Procesal Penal.
El Código Procesal Penal ha transformado la justicia penal en el Perú; sin embargo, es necesario analizar cómo es aplicado por los operadores en los casos concretos. Este es el mayor reto de la reforma procesal penal, porque implementar el modelo acusatorio que inspira el Código Procesal Penal implica un cambio cultural, lo que no ocurre automáticamente con la vigencia del código, sino que es el resultado de un trabajo de capacitación y práctica que toma tiempo en consolidarse.
El objetivo principal es brindar herramientas para un mejor desenvolvimiento de los operadores jurídicos, que trabajan con el modelo acusatorio y para la preparación de los estudiantes de derecho.
Introducción
En el proceso penal con el modelo acusatorio, el abogado litigante debe tener un amplio conocimiento de las diversas materias que involucra la defensa penal, pero todo ese bagaje de conocimiento tiene que enmarcarse en la litigación estratégica. Esto se explica porque con el Código Procesal Penal, las partes deben planificar y realizar su actuación procesal desde que se inicia el caso con el objetivo de generar convicción en el juez en el juicio oral.
Con la “Guía operativa de litigación oral con el Código Procesal Penal”, la Secretaría Técnica de la Comisión Especial de Implementación del Código Procesal Penal quiere contribuir a atender esa necesidad. A través de las prácticas compartidas en cada capítulo por los expertos internacionales que han colaborado con su elaboración, se espera ayudar a fortalecer las habilidades de los operadores jurídicos, de modo que ellos puedan incorporar estas técnicas a su trabajo diario y tener un mejor desempeño en los procesos penales. Además, la guía servirá a los estudiantes de derecho que en un futuro cercano serán jueces, fiscales y abogados defensores en la especialidad penal.
En el Capítulo I de la guía se desarrolla la teoría del caso, a la que el autor define como un conjunto de actividades estratégicas que debe desarrollar un litigante frente a un caso, que le permitirán determinar la versión fáctica que sostendrá ante un tribunal, su sustento normativo y decidir la manera más eficiente y eficaz de presentarla persuasivamente.
El Capítulo II trata sobre el alegato de apertura, definido como un ejercicio persuasivo en el que el litigante presenta al juez los hechos más convincentes de la teoría del caso. En este capítulo, el autor comparte diversas recomendaciones que permitirán presentar un alegato de apertura que capte la atención del juez para que pueda ser comprendido y recordado.
Luego, el Capítulo III desarrolla el examen directo, que es la revisión de los testigos propios durante el juicio oral. Allí se resalta la importancia de esta técnica de litigación para dar a conocer al juez las proposiciones centrales de la teoría del caso e incluye aspectos como la preparación del examen directo, los tipos de preguntas, su estructura, entre otros.
En el Capítulo IV se desarrolla el uso en juicio de las declaraciones previas para el refrescamiento de memoria. Este capítulo es presentado de manera separada al de examen directo – que es donde le corresponde estar incluido -, atendiendo a que el Código Procesal Penal establece el procedimiento de refrescamiento de memoria para peritos y testigos en el inciso 6 del artículo 378.
A continuación, en el Capítulo V se desarrolla el contraexamen, definido como el conjunto de preguntas que se dirigen por un litigante al declarante que ya ha prestado testimonio directo ante el tribunal. El capítulo desarrolla aspectos como la importancia, alcance y objetivos del contraexamen, la preparación, las preguntas a utilizar, preguntas sugestivas y abiertas, el momento para contrainterrogar, entre otros.
En el Capítulo VI se presenta una guía para el análisis de testigos y planeación de su examen. El objetivo del capítulo brindar herramientas que permitan anticiparse al examen de testigos, definiendo sus objetivos de antemano, para preparar las preguntas que eventualmente realizarán y hacer una autoevaluación una vez ejecutado.
La guía continúa con el Capítulo VII, sobre las objeciones, definidas como la forma de garantizar el principio de contradicción a las preguntas de la contraparte, permitiendo así que las partes puedan ejercer el control horizontal natural de un sistema acusatorio.
El Capítulo VIII, sobre la prueba material y documental, aborda la relevancia de que la prueba se practique con inmediación y contradicción, las deficiencias que tienen las cosas para cumplir ambas condiciones y la autenticación como proceso probatorio para aliviar las deficiencias de la prueba material y documental.
A continuación, el Capítulo IX trata el alegato de clausura, cuyo objetivo es proponer conclusiones sobre los hechos que se han presentado durante el juicio oral. En esta parte no se agregan hechos nuevos, ni medios de prueba; sin embargo, usando la estrategia es posible, al hilar los argumentos, dar valor a hechos o circunstancias públicos y notorios, que forman parte de la lógica y las máximas de la experiencia.
Para finalizar, el Capítulo X desarrolla la litigación oral en las audiencias de apelación de sentencias. El capítulo inicia con una sección sobre el derecho a la pluralidad de instancias y luego analiza la fase escrita y oral del trámite de apelación.
En suma, la “Guía operativa de litigación oral con el Código Procesal Penal”, a través de las recomendaciones y prácticas incluidas en cada capítulo, buscan orientar el trabajo de los operadores jurídicos y fortalecer sus capacidades en litigación oral.
Para finalizar, quiero agradecer, en el orden en que aparecen los capítulos en la guía, los valiosos aportes de los profesores Leonardo Moreno Holman (Chile), Ricardo Elías Puelles (Perú), Rogelio Contreras Melara (El Salvador), Carla Pratt Corzo (México), Felipe Marín Verdugo (Chile), María Celeste Jiménez Riveros (Chile) y Giammpol Taboada Pilco (Perú), quienes en forma desinteresada se sumaron a lo largo de varios meses a la elaboración de la presente guía en forma conjunta con el abogado Dalmiro Huachaca Sánchez (Perú), encargado de la coordinación y revisión del documento, cuyo contenido estoy seguro que será de gran utilidad para ustedes.