Estos son algunos importantes consejos para Abogados que empiezan, para que puedan desempeñarse de la mejor manera en los inicios del ejercicio de su profesión. Son 7 consejos que compartimos contigo para ayudarte a que logres el éxito laboral tan ansiado.
Iniciar la vida profesional no es nada sencillo, y por ello debes tener en cuenta algunas recomendaciones te damos en este artículo.
Es sin ninguna duda el consejo más importante y que marcará una diferencia en tu trabajo. Debes tener en cuenta que es imposible dominar todas las ramas del Derecho, además de que no todas son de tu agrado y debes especializarte en aquella que más te gusta.
Pero la razón más importante por la que debes especializarte son tus clientes. Pues ellos prefieren abogados expertos, que dominen una determinada área.
En general en todas las profesiones se tiene que seguir preparándose, en algunas más que otras claramente. La carrera de Derecho no es la excepción ya que las leyes, así como la jurisprudencia son cambiantes y por ese motivo hay que actualizarse constantemente.
A pesar del tiempo de experiencia que tengas, tienes que seguir estudiando y actualizándote en temas geneéricos y sobre en los temas que te has especializado.
Muchos Abogados al día de hoy aún no aprovechan del potencial que puede significar Internet para generarse sus primeros ingresos. La mayoría de abogados trabajan bajo el método de referencia de otros clientes, amigos o familiares, pero en la actualidad eso ya no es suficiente.
Si estas empezando a ejercer tu profesión puedes aprovechar el gran potencial que te ofrece Internet con una mínima inversión. Para ello debes gestionar tus redes sociales y tener una buena página web que se convierta en tu tarjeta de presentación virtual.
Los costos por una página son muy baratos comparados con otros medios de publicidad y comparados con los beneficios que te pueden dar. Así que piensa bien en tener tu propia página web que puede ser una gran empuje para tus inicios.
Y por favor olvida aquellos sistemas que te ofrecen páginas gratis, que en realidad no te harán nada bien. Lo que necesitas es contratar un buen diseñador web o alguna agencia que tiene la experiencia en el tema. Como resultado tendrás una bonita página y muy funcional que de verdad ayudará a tu imagen.
La persona más importante de un despacho es el cliente, por eso hay que cuidarlo mucho. El motivo principal del 90% de los clientes que cambian de Abogado, es porque el suyo no les hace caso, no les devuelve las llamadas, no les contesta los correos, etc. Una llamada o un correo hay que contestarlo como máximo en 24 horas.
Siempre hay que tener presente una cosa: el cliente es quien paga tus facturas, y no me refiero a las minutas que les envías por tu trabajo, sino tu casa, tu coche, el colegio de los niños, etc.; esto es algo que hay que tenerlo presente siempre, por ello, trata al cliente como a ti te gustaría que te trataran si acudieras a un abogado.
Que el cliente sea la persona más importante de un despacho no quiere decir que tenga siempre la razón. Al cliente siempre hay que decirle la verdad, que implica decirle cuándo tiene la razón y cuándo no, cuándo acierta y cuándo se equivoca.
Nunca compitas en precio, siempre habrá un compañero que cobre menos que tú, compite en calidad y servicio. Ten en cuenta que ser el Abogado más «barato» no es algo que inspire confianza.
Es frecuente ver profesionales que entran en sala sin saludar y se van igual que entraron. Eso es un gran error. Un juicio empieza en el momento que entras en la sala de vistas y termina en el momento que sales, por eso hay que cuidar las formas:
a) Hay que saludar al entrar y salir. Es algo tan en desuso que hay jueces que casi se sorprenden –o se asustan– cuando los vas a saludar.
b) Hay que cuidar la vestimenta, por respeto a la sala y al cliente.
c) Hay que cuidar la forma de dirigirse a S.S.ª, Ministerio Fiscal, compañeros y a las partes –demandante, demandado, denunciante, acusado, testigos, etc.–.
Es decir, hay que cuidar los detalles, porque los jueces también son humanos y, en caso de duda, una buena impresión puede inclinar la balanza a tu favor.